Detenernos un poco en el camino, y quizás ni pararnos, simplemente bajar la velocidad. De vez en vez es conveniente darle un vistazo al reloj y tratar de seguir al minutero, en lugar del segundero.
No siempre puedo ver detalles de la ruta cuando vamos buscando sortear ese escalón en el menor tiempo posible. A veces pretendo llegar a la cima uno o dos segundos antes que la vez anterior.
Esta vez nos tomamos el tiempo de hasta detenernos unos minutos antes de arrancar la bajada por el espinazo… y descubrí unos paisajes que ahí estaban simplemente esperando para ser plasmados en la lente de la cámara y traídos ante los ojos de los que como ustedes se toman unos minutos para ver que tenemos el día de hoy:



Y luego, tomando un poco de distancia, una genial panorámica de la retadora bajada al espinazo, siempre demandando el ciento diez por ciento de la atención, concentración.

Combinando flexibilidad y firmeza en el manubrio, balance … viviendo al máximo el momento para no perder el camino, concentrado en el presente pero mirando al pasado para recordar lo aprendido, atisbando al futuro, para prevenir los obstáculos y los desvíos a la vez de que hemos de medir el riesgo, porque luego de la rodada hemos de regresar a casa, con los nuestros, sea a almorzar, hacer algún mandado o limpiar la casa, jeje.
Pero por lo pronto… a rodar!
Aquí la ruta: http://app.strava.com/activities/92840773
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