Visiones desde mi bicicleta

Una tarde cualquiera puede convertirse en una tarde única,

Una brecha no conocida es el camino a un nuevo reto que ni siquiera imaginaba,

Una fresca mañana en el bosque es un regalo para mis amigos y para mi, de parte de las entrañas de un bosque que duerme a 20 minutos de una ciudad de sonámbulos…

Y son sólo 3 momentos para recordar 🙂

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Related Post

Lo mismo pero diferente

Así se vive el rodar en la montaña. Nunca verás una ruta similar a la que rodaste la semana pasada, aunque ruedes por los mismos senderos. Sé que ya lo he dicho en otras ocasiones, pero no me preocupa repetirlo… si, le atinaste, porque en esta ocasión, también es diferente a otras veces que lo […]

Cierro mis ojos…

Y me veo recordando una rodada más… eso me trae paz y fuerza a la vez.Descubro que en este momento de mi andar, rodar es mi meditación, es mi momento de reflexión, es recuperar energía y aún con el cansancio de una sabrosa rodada, mi espíritu se nutre y se fortalece.Para otros puede ser estar […]

Entre pasado y futuro

Fresca, una senda que se esconde bajo una capa de hojas no muy viejas. Mi memoria y la tenue huella de otros que han cruzado antes me permite guiarme a través de este paraje boscoso, afortunadamente poco frecuentado por estar un poco más retirado de lo que la mayoría de mis colegas están dispuestos a […]