Y no, no es para tener poderes de los 4 fantásticos (no son mis preferidos), o para conseguir una mutación… aunque pensándolo bien, esto de “commutar” si te puede sacar un poco de la media del ciudadano actual en esta ciudad, en este país… en muchos de los países de este planeta.
Hoy iba ya regresando a casa, cuando en mi trayecto me tope con esta vista… bajé de la bicicleta, la puse en modo “posando” y le rendí tributo, a mi corcel, a mi camino, a mi ciudad, a mi andar…
Tome la foto pensando la frase simple “Vamos al commuting”, “commutemos pues”! Cuánta falta nos hace salirnos de la zona de confort en la que el “estilo de vida” nos ha encasillado, no somos la mayoría los que tenemos automóvil, pero si lo somos los que tememos salir de la masa y movernos por nosotros mismos. Excusas las hay y son muchas… que la distancia, que los hijos, que las cargas, que la flojera (bueno, esta última sería la más congruente respuesta)…
Me quedo con mi toma, desde la parte poniente de la ciudad, sobre una de las vías más congestionadas, viendo al norte, desde un balcón puesto para mí solito en este día, ahí esperando a que pasara para disfrutar por unos momentos de una vista sin igual… superando la nata del smog, mi vista alcanzaba a brincar sobre mi ciudad y posarse en los cerros del norte, en la barranca de Huentitán, allá, clarita… solo hagan zoom a la foto… y más allá, donde realmente la vida es vida, donde no hay en donde esconderse de ser simplemente hombres y mujeres que podríamos estar disfrutando del brillo del sol, del correr de aguas cristalinas, de cantos de pájaros y escurridizos animales que escaparían de nuestra vista…
simplemente, ahí estaba para mí, para darme ánimo y recordarme que soy más de lo que soy… o lo que aparentemente soy… por eso que bueno es “commutar”!
Ro
Pretextos siempre sobran, como en cualquier actividad ya sea estudiar, leer, hacer ejercicio, comer sano, es solo cuestión de querer y darse el tiempo o espacio. Sobre todo querer.