Un domingo rodando en pavimento y memorias…

El domingo salí a rodar, esta vez a la recreactiva. Iba sin ninguna expectativa. Simplemente aprovechar algunos minutos ahora que por esto o aquello, no saldría al bosque, a la brecha, al polvo. Y fue provechoso reconocer la vía. En momentos con más riesgos que ir en la montana, por aquello de los perros que se atraviesan sin avisar (los animales). O los infantes que hacen sus pininos en dos ruedas y que no sabes si frenar, si rezar, si dar a la derecha o a la izquierda. Pero afortunadamente esta vez fue como otras, sin incidentes. Me enfile de Chapultepec hacia Tetlán, por una de las columnas vertebrales de mi querida Guadalajara, el “viaducto” Vallarta-Javier Mina. He de ser sincero, no me gusta tener que bajarme de la rila para cruzar el paso a desnivel que pasa por debajo de la calzada independencia. Ahí a todos nos hacen bajarnos de la bicicleta para pasar caminando, entiendo la razón, pero igual no me gusta. Así que hoy la hice “por la libre”, di vuelta unas cuadras antes saliéndome de la vía, tome una calle paralela: Hidalgo… pero claro, bajo mi propio riesgo para que mis críticos puristas bajen las cejas. Esa es una ruta común para el ciclista de a diario, bajar por Hidalgo para cruzar con “vuelito” la calzada y seguir para luego dar vuelta a la derecha y regresar a la zona de Obregón. Sin incidentes, esa calle ya en otras ocasiones la he tomado, y entre semana, que se pone más divertido con más camiones, automóviles y peatones, que no van a las calmas como en domingo.
 
¿Saben? Me gusta sentir que ya he rodado un buen de mi ciudad en mi bici… no es para presumir, pero es para sentirse orgulloso, la neta del planeta; Analco, Belisario Dominguez, Plaza de la Bandera, Gonzalez Gallo, La fuente olímpica, el Jalisco, Atemajac, Andares, Pablo Neruda, Patria, Colomos, Sta. Tere, Colinas de San Javier, La Estancia, Ferrocarril, el Fresno, zona Industrial, Plaza del Sol, Paseos del Sol, Chapalita, Abastos… Conoces las entrañas de la metrópoli, descubres recovecos que nunca de los nunca hallaras mientras estas encerrado en tu carro y en la maraña del trafico citadino. Puedes palpar de una manera muy diferente los diferentes aromas de cada barrio, los tipos de gente, “el ambiente”. Y al final te descubres más enriquecido porque te haces al menos en cierta medida, parte de cada vecindario y con ello, un ciudadano de TODA tu ciudad.
Y volviendo a mi rodada dominical, quiero dejar una postal que me gustó. Aquí se ve que todos cabemos en las calles… todos somos amables solo que no nos damos cuenta, o no nos damos chance a nosotros mismos de disfrutarlo.

Rogelio

2 Replies to “Un domingo rodando en pavimento y memorias…”

  1. Bien bien ruteo por gdl,yo en los 90¨´s, entregaba tarjetas de credito en mi rila, por todos los lugares que mencionas, entregaba mas del 80%, que los otros mensajeros, que husaban carro o moto.estraño mi ciudad y mas sus calles por las que pase, saludos,a todos los biker

  2. Oh si, que dicha rodar por esta ciudad… conocer tanto y a tantos… Esas callejuelas, los “atajos” para llegar de glorieta colon a la normal sin pasar por Avila Camacho, por ejemplo :o)

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Related Post

Atemajac, una rodada que exige y da…

Hola, un domingo se pinto con los colores de nuestros jerseys, se inundo con el sonido de las ruedas sobre una tierra aún húmeda que nos concedió unas horas mágicas, fresco por la mañana, templados pasos entre valles boscosos, sol atemperado mientras subíamos entre montañas, y hasta un nublado previo a una lluvia para refrescar […]

Rodando se aprende a vivir…

Rodar es más que un deporte, es un modo de vivir. Esta frase se repetirá cada vez mas… para muestra, un foto como esta a la derecha, mis colegas que aquí aparecen compartimos no solo trabajar en donde mismo, sino el gusto por rodar… ja ja, y  hasta pagar por rodar a veces… esto se […]

Chapaleando

Afortunadamente la vida tiende a ser más un ser como un “stand up” (improvisando), que una obra de teatro (seguir un guión). Cada uno de nosotros tiene ese libre albedrío para ir moviendo el timón hacia un lado o hacía el otro. Claro, como humanos que somos, no tenemos el completo control de lo que […]